El contenido de ceniza aumentó, a las 48 hrs de fermentación alcanza su máximo valor (12,59 
%) para luego mostrar una ligera disminución a las 96 hrs, mientras que los niveles de urea 
manifestaron  una  disminución  a  medida  que  incrementó  este  factor.  Las  cenizas  indican  el 
contenido mineral de un alimento y es necesario para el metabolismo microbiano o animal. En 
FES de desechos de guayaba (Psidium guajava), Jauregui, (1992), obtuvo incrementos de 0,8 
unidades, sin adición de premezcla minerales, durante los primeros 7 días de fermentación. La 
disminución del indicador sería el resultado de la utilización por parte de los microorganismos en 
su metabolismo, Por su parte, Pérez, (1996), en FES del mijo de perla (Pennisetum glaucum) 
obtuvo un incremento de 0,5 unidades a las 72 hrs como consecuencia del metabolismo celular, 
de  igual forma Espinosa,  (2018),  en FES de la yuca, encontró incrementos en 3,2  unidades 
porcentuales durante el proceso. 
 
La disminución del contenido de ceniza en los procesos fermentativos, puede además ser causa 
de  la  lixiviación  de  elementos  minerales  solubles  que  podría  haber  dado  lugar  a  la 
descomposición de los componentes del sustrato en sus formas absorbibles, Igbabul, (2014). 
La elevación en los valores de cenizas con el tiempo de fermentación también fue reportada por 
Brea, (2016), en la FES de la harina de frutos del árbol del pan (Artocalpus Altilis. L) donde el 
contenido  de  cenizas  (P<0,001),  aumentó  en  0,82  unidades  porcentuales  a  las  48  hrs  con 
respecto a las cero horas.  
 
El calcio mantuvo un comportamiento similar, pues este indicador aumentó proporcionalmente 
con el tiempo de fermentación y disminuyó con la inclusión de urea. Posiblemente se deba a la 
presencia de minerales de forma natural en la cáscara de cacao. 
 
La fibra ácida detergente mostró un aumento a las 48 hrs de fermentación para luego disminuir a 
las 96 hrs, respecto a los niveles de urea añadidos se observó una disminución de este indicador 
y de forma marcada con la inclusión de 1,0 % (47,66) la disminución en el contenido celular, 
pudiera atribuirse a la utilización de los azúcares solubles de la harina de cáscara de cacao por 
la microbiota que se establece en el sistema. Sin embargo, en la literatura aparecen numerosos 
trabajos  donde  ocurren  modificaciones  significativas  en  los  porcentajes  de  la  fibra  durante 
procesos de FES, Elías et al., (1990) al elaborar Saccharina; Ramos, (2005), al combinar la caña 
de azúcar con otros subproductos y Moyano, (2014), en la FES de la papa.  
 
Según Aranda et al., (2012), el incremento de la fibra durante el tiempo de fermentación, puede 
deberse  a  que  los  microorganismos,  que  se  desarrollan  en  el  sistema,  utilizan  los  azúcares 
simples  que  se  encuentra  en  el  contenido  celular,  lo  que  provoca  un  incremento  en  la 
concentración de paredes celulares. 
 
El  comportamiento  del  indicador  pudiera  atribuirse  a  que,  en  todo  proceso  de  FES,  los 
microorganismos utilizan casi la totalidad de los carbohidratos fermentables para su crecimiento 
y multiplicación, Carrasco et al., (1997); Van Soest et al., (1991), mencionaron que, en procesos 
como el ensilado, las alteraciones más apreciables son el aumento en las fracciones fibrosas: 
FDN  y  FDA.  Este  mismo  autor  refiere  el  posible  ataque  de  la  fracción  fibrosa  que  ejercen 
algunos grupos microbianos celulolíticos, los cuales son capaces de degradar la celulosa hasta 
azúcares simples como la glucosa y esta hasta CO
2
 y H
2
O. Esto ocurre mediante complejos 
procesos  enzimáticos;  a  pesar  de  la  fuerte  resistencia  que  estos  ofrecen  a  la  degradación 
microbiana, dado por la complejidad estructural del sustrato.